Y entonces viajé a todas mis versiones anteriores y admito que me da gusto recordar que siempre he sido bastante parecida a lo que soy ahorita (con menos medidas), que paso muchísimo tiempo conmigo, que me hago regalos, me pongo guapa y me saco a pasear y también me encierro, no muestro la cara por días, no me baño a menos que sea absolutamente necesario y me dov el permiso de no hablar con nadie ni ser productiva. (premenstrual)